En el año 1984 el Dr. Per-Ingvar Branemark (3 de mayo de 1929 - 20 de diciembre de 2014) en la ciudad de Toronto, presentó el trabajo que había comenzado 13 años antes en Gotemburgo. El Dr. Branemark, Médico Traumatólogo con ese trabajo científico cambió el mundo odontológico.
Su genialidad y observación se produjo por un estudio que realizaba en perros.
Médico traumatólogo de profesión pero genio y emprendedor de espíritu, observó que unas cápsulas metálicas que instalaba en perros, al poco tiempo no se podían retirar. Esas cápsulas eran de TITANIO. Su observación e imaginación le permitió aplicarlo a la pérdida de piezas dentales.
Increíble, médico, traumatólogo, trabajando con perros desarrolló una alternativa que en muchos pacientes tratados en ese momento aún tienen sus piezas dentales funcionando.
Su descubrimiento y luego invención de un sistema generó una transformación en las aspiraciones y opciones de salud de millones de pacientes en todo el mundo.
El secreto del éxito y ejemplo a seguir; observar, imaginar, crear, concretar y compartir.
Lo dijo Steave Jobs en muchas oportunidades. Hay que insistir en nuestras intuiciones y luego de tener los puntos seremos capaces de unirlos y ver que todo el esfuerzo tenía un resultado genial. En cada uno de esos puntos posiblemente eran solo satisfacciones que quizás no se podían concretar o aplicar pero luego mirando atrás aparece todo claro. Branemark generó y desarrolló un sistema y protocolos que actualmente guían los principios modernos y seguramente nunca imaginó lo que estaba creando.
En Chile unos pocos años después, aproximadamente en el año 1989 el Dr. Mario Isa, Profesor de la cátedra de Cirugía Maxilofacial de la Facultad de Odontología y ex presidente de la Sociedad de Cirugía y Traumatología maxilofacial de Chile fundó junto a otros cirujanos la Sociedad de implantología. El Dr. Isa estaba hace mucho tiempo trabajando con implantes de ALUMINA y en ese momento aparece el titanio como el elemnto indicado. Junto a otros Cirujanos Maxilofaciales como los Dres. Juan Olea, Enrique Torres, Victor Tirreau y otros Profesores de Cirugía de la Universidad de Chile y de facultades de la Universidad de Valparaíso y de Concepción comenzaron a utilizar los nuevos sistemas desarrollados por el Dr. Branemark.
Posteriormente se creó la especialidad de Implantología y especialidades como Periodoncia, Rehabilitación Oral y Cirugía Maxilofacial han incorporado durante muchos años la implantología en sus programas teóricos y clínicos con complejas unidades para la formación de sus especialistas con sólidas bases teóricas.
Desde nuestra perspectiva el avance de la implantología como área de la cirugía continuará evolucionando con insospechadas innovaciones. Dentro de ellas, incluso generación de piezas dentarias cultivadas mediante reproducciones 3d individualizadas para cada paciente. Seguramente el titanio como material seguirá presente pero habrán nuevos sistemas que estarán solamente limitados por nuestra capacidad de imaginar.
Seguramente nuestros nietos odontólogos tendrán una realidad muy distinta y perspectivas de desarrollo profesional que se alejarán enormemente de las discusiones actuales contingentes de los ámbitos y especialidades.
Desde mi perspectiva, la limitación de las especialidades genera estanco en el conocimiento. Si existiera esa delimitación rígida hubiera impedido a profesionales como el Dr. Samy Alamo desarrollar la cirugía maxilofacial en Chile dado se trataban solamente patologías asociadas a las infecciones, tumores, o traumas. Bajo el mismo prisma, un médico traumatólogo como el Dr. Branemark nunca hubiera pensado en instalar un implante dental y nunca un odontólogo hubiera desarrollado técnicas digitales ni de confección de biomodelos o algo tan cotidiano como trabajar con una impresora 3d.
Tengo la convicción que las capacidades de todos los profesionales quirúrgicos de Chile con formación y certificación superan por lejos las técnicas utilizadas (me refiero a distintos procedimientos incluso técnicas quirúrgicas concretas como las extracciones dentales o la instalación de implantes dentales de titanio).
Creo que lo fundamental es tener por delante nuestro objetivo 1, la salud de nuestros pacientes. Tratarlos desde un punto de vista humano y entregarle los tratamientos con bases científicas sólidas y siempre enmarcados en nuestras competencias profesionales reales.
Especialidades Universitarias formales como periodoncia, implantología, cirugía maxilofacial tienen competencias técnicas y legales para el manejo del paciente mutilado que requiere de un tratamiento integral rehabilitador que incluya los implantes dentales de titanio. Todos estos especialistas tienen competencias con algunos matices y enfoques diferentes pero sin duda alguna pueden resolver una problemática y cualquiera de ellos va a necesitar en algún momento de otras especialidad para complementar la terapia y finalmente lograr un tratamiento óptimo para nuestro paciente.
Me parece egoísta para con el paciente que una u otro especialista señale que solo su área resolverá un tratamiento complejo, muy por el contrario. Solo esa afirmación está estrechando las opciones al enfermo.
Creo que los estándares de calidad en medicina en Chile son altos y nuestros tratamientos no pueden escapar de ello. La incorporación de Chile a OCDE mas allá de cifras y ranking creo que debe equipararse en la calidad de vida de ellos y eso está presente en la medida las prestaciones de salud incorporen un foco humanista y no visiones parciales y mezquinas que solamente dañan la profesión y finalmente repercuten en la salud de nuestros enfermos.
Dr. Antonio Marino
Cirujano Maxilofacial
www.maxilofacial.cl
www.ortognatica.cl
Notas Importantes de leer
Comunicado de la Sociedad de Ortodoncia de Chile
Comunicado de la Sociedad de Periodoncia de Chile
Comunicado de la Sociedad de Cirugía Maxilofacial de Chile
Comunicado de la Sociedad de Implantología de Chile
Comments